Desconciertos masculinos (I): Pareja + cama no es = a sexo
(Os presento al psicólogo José Bustamante, nuestro primer invitado a postear. Colaboró conmigo en “Deseo” y prepara un libro sobre sexualidad masculina, del que os hablaré cuando se publique porque lo poco que me ha dejado husmear me gusssta. Pero, a lo que iba, yo no puedo dejar de ser como soy –con lo bueno y lo malo- y soy muy consciente de que peco de mirada femenina, hetero y de mujer que vive en pareja, por lo que, siguiendo con mi plan inicial, he decidido invitar a otras personas a postear. Creo que va siendo hora de dar cabida a más voces y más puntos de vista… y no sólo en los comentarios. Sé que JB os va a gustar. Me siento como una niña con zapatos nuevos.)
Soy psicólogo, especialista en sexualidad y pareja y he de confesar que practico el noble arte de dejarme el género fuera del despacho cada vez que hago terapia. En ese tiempo me olvida de que soy hombre y consigo, la mayoría de las veces, que el paciente me vea como un ángel, por lo de no tener sexo digo, no por ser muy bueno, tener alas o venir del cielo. Hoy, sin embargo, me vais a permitir que me enfunde la camiseta de mi género y que, además de sexólogo, sea hombre. De esta forma, recuperada mi masculinidad os podré empezar a contar (a lo largo de diferentes posts) lo que a nosotros nos gusta, lo que nos cabrea, nos da miedo, buscamos, queremos y aquello que nos FRUSTRA en la sexualidad.
“Frustración” es una de las palabras más repetidas en el discurso sexual masculino. Y esto nos pasa, convendría tomar nota, porque nos creamos unas expectativas elevadísimas sobre el sexo que, claro… la mayoría de las veces no llegan a cumplirse. Y es que hay que reconocerlo, en lo que a las relaciones se refiere, acostumbramos a ser muy cándidos, tanto que se nos cuelan por todas partes ideas mágicas que alimentan estas expectativas de las que os hablo.
¿Ideas mágicas? Pues sí, por ejemplo, ocurre que cuando encontramos pareja solemos creer ingenuamente que tenemos el sexo asegurado de por vida. No es que lo pienses en plan estratega, pero el anhelo existe. De alguna forma creemos que se acabó el tener que flirtear, pasar noches eternas buscando presa, invitando a cenar o a copas, recibiendo negativas después de habértelo currado un montón, tener que escuchar excusas horribles, cuidar al máximo qué hago, qué digo, qué me pongo, pasar horas creando en Facebook una campaña de marketing personal con las imprescindibles fotos de gatitos… y hasta poner velas a San Baco (dios romano del vino y la lujuria) para que eche una mano. Cuando decidimos vivir juntos, pensamos muchas veces que hemos alcanzado la cumbre sexual y pensamos: “ahora que tenemos sitio, follaremos mucho más”. ¡Qué ilusos!
Me contaba un paciente frustrado: “Cuando éramos novios nos pasábamos el tiempo esperando a que no hubiera nadie en casa de sus padres, tratando de ahorrar para irnos a un hotel, buscando “picaderos” donde aparcar el coche y poder estar juntos… Cualquier momento era bueno. Y, claro, yo pensaba que en cuanto tuviésemos el piso, esto iba a ser una versión española de “9 semanas y media”… pero nada que ver: cuando nos fuimos a vivir juntos, nuestra película se parecía mucho más a las de Disney. Me preocupa, porque si estamos así ahora, ¿qué me espera cuando llevemos 20 años?”.
¿Sus palabras le suenan a algún hombre? Es probable que sí, porque es una expectativa que se repite en muchos varones y que la realidad se encarga de convertir en desilusión.
Dicho lo dicho, una aclaración: esto no significa que busquemos pareja sólo por razones carnales. Menos aun cuando nos enamoramos, porque entonces estamos dispuestos a renunciar al sexo por estar con ella, cosas de la enajenación mental transitoria.
Una idea para acabar: Es fundamental tener expectativas más realistas sobre la sexualidad y la pareja, pero esto no significa resignarte a vivir una vida que no te hace feliz.
Nota de Sylvia: José Bustamante dirige el Gabinete de Psicología y Sexología Martos Bellmunt, de Elche (http://www.martosbellmunt.com). Es Secretario General de la Asociación Española de Especialistas en Sexología y Miembro Fundador de la Academia Española de Sexología y Medicina Sexual.
Más cosas. ¿Tienes una idea para un post? Mejor aún, ¿te atreves a postear? Si te ves con ganas, escríbeme y lo hablamos: [email protected]
Mi mujer y yo estamos leyendo el libro de Bustamante, y nos parece muy revelador. Ahora que ella está en plena menopausia no tiene nunca ganas, pero de alguna forma lo echa de menos.
Considero que ninguna pareja puede funcionar realmente si no hay sexo. Y justamente la falta de sexo acarrea un problema mucho mayor que está oculto o se juega a que está oculto. Es algo muy complicado.
Me parece muy interesante este libro. Me lo agendo para cuando salga.
Saludos.
Yo les haría una pregunta a los hombres: ¿Estáis seguros que vuestras mujeres disfrutan del sexo estando con vosotros? El hecho de que una mujer no tenga ganas de estar con su pareja, que se meta en la cama antes que él y se haga la dormida; no le apetezca nunca o casi nunca tener relaciones con él, o lo hace para callarlo, que no se enfade o que la deje tranquila ¿por qué es? Creo, porque ella no disfruta con su pareja. Puede ser por diferentes razones, por que él se ha dejado, porque siempre busca su placer, porque piensa que su mujer con lo que le da tiene suficiente, porque la ha oído gemir.
La culpa es nuestra chicas, no hablamos, no nos expresamos, no decimos lo que nos gusta que nos hagan. Llevar la iniciativa. Pongo un ejemplo: la pareja de novios que un día ella se deja hacer y él le roza la ingle y ella vibra y se vuelve loca de placer pero nunca llega a decírselo. Ni mú. La próxima vez, ¿él que hace? Otra cosa distinta, por qué cuando la rozó ella no dijo nada. Como ella no pide… y al cabo de los años en una reunión de amigos ella dice, uy yo recuerdo cuando de novios mi marido me rozo las ingles y volé y luego con el tiempo todo se pierde y ná de ná. Él le dice: ¿Cómo? Si eso no lo sabía, yoooo. Nunca dijiste nadaaa..
Pues nos pasa un poco eso.
Si no recuerdo mal, leí en Tu sexo es tuyo, que las mujeres tenemos el concepto de que los hombres vienen con un manual de instrucciones de cómo funcionamos. En las primeras relaciones esperamos que ellos sean maestros en el arte amatorio, un concepto un poco egoísta por nuestra parte.
Damos también por supuesto que ellos son adivinos y saben cómo y dónde. Para nada, debemos echarles una mano, pues cada persona es diferente y lo que le gusta a una, puede no gustarle a otra.
Genial la autocrítica Isabel, pero nosotros tenemos que aprender también a entender que funcionamos diferente, que hay que aprender a dedicar los esfuerzos a propiciar el deseo y no a convencer a la pareja para que aparezca…y un largo etcétera.
No siempre es fácil entenderse, pero bien entendido, hasta puede ser un juego de lo más apasionante!
Puede??? DEBE!!!
Cristina, me viene genial que hagas esa pregunta.
Tiempo atrás cuando la relación con mi chica-mujer-esposa-loquesea tocó fondo fue una de las preguntas que le lancé “tu disfrutas conmigo en la cama?” su respuesta fue clara y contundente “como no voy a disfrutar si llego como mínimo 6 veces al orgasmo cada vez que lo hacemos”… Ahi me dejó destrozado porque vi que no era culpa mía (o por lo menos, toda no era mía) sino que era ella la que se estaba haciendo daño. Me dijo que sí, que yo la seguía atrayendo, pero que… nada era como antes así que le planteé “leñe, hagamos las cosas que hacíamos antes y disfrutemos como antes!!” negativa en redondo y vuelta para atrás a la misma cantinela es lo único que obtuve… Me resigno? Me pego un tiro? Me tiro al tren? Me tiro al maquinista?
Al, nunca nada es “como antes”, porque como diría Neruda “nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos”. La vuelta al pasado nostálgica es un agradable ejercicio intelectual, pero no creo que pueda aplicarse en la vida real.
Ya, si en eso estoy de acuerdo contigo, el problema viene cuando mi pareja le parece que ya nada es lo mismo pero tampoco quiere volver atrás a recuperar esos valores que nos ponían a 1000… Vamos, que ni para alante ni para atrás…
Increíble Sylvia!!! Cada día hay más cooperación…
Hola a tod@s!!!
Mi situación es a la inversa de la normal entre hombre y mujer, jajajaja, yo deseo a mi pareja con locura, hasta que llegó al punto en que me cansé de ir siempre detrás de él. Él actuaba como lo haría una mujer, está cansado, no tiene ganas…
Una se acostumbra a que su pareja el último aliento del día sea para la unión de los cuerpos y nada de día por medio, pero ahí está el muro, jajajaja, ahora el último aliento no existe…
Ahora si hacemos el amor es una vez por semana y si cae… Frustrante, muchíiiiiiiiisimo, no sabéis cuanto. Yo sé que me ama, lo expresa con cariño, palabras, apego, pero la realidad que inunda mi corazón y pensamiento es otra.
Sexualmente frustrada. Duele, duele mucho, hasta el punto que te hace sentir que no vales nada, que no le gustas, etc.
Es duro estar con alguien a quien amas y deseas, y que no logra hacerte sentir amada. Incompatibilidad sexual, nos gustan métodos diferentes.
Con mucho esfuerzo logré que leyera Tu sexo es tuyo de Sylvia, parece que las ideas comenzaron a cambiar, aunque me gustaría más frecuencia, más posiciones, más libertad sexual, pero todo lleva su tiempo de enseñanza y entrenamiento.
Gracias a tod@s por vuestros comentarios…!!!
Hola Diana,
No te sientas para nada un bicho raro, en la consulta crece sin cesar las parejas en las que es él quien no tiene apetito o lo tiene pero menor y menos variado que ella.
Muy interesante que él se empape de buena información como “tu sexo es tuyo”, husmea en “Deseo” hay apartados en los que Sylvia explica la falta de deseo masculina.
No te conformes pero tampoco lo conviertas en una obsesión, podéis seguir creciendo juntos si él tiene el espacio para desear y tú te cuidas de no pensar ni por un momento que puede tener que ver su poca líbido con tu atractivo sexual.
Gracias por compartir tu historia
Nos montamos un club de mujeres/maridos incomprendidos?? Jaajajaja, creo que estamos unos cuantos por aquí.
En los comentarios que he leído por aquí, juntando unos y otros me he visto 99% identificado, flirteos o “cuernos” on-line sin que la otra mitad de la pareja lo sepa, parejas que nunca tienen ganas o ven mejores cosas que hacer antes que disfrutar con su pareja de un buen rato de sexo y pasión (sobre todo pasión por favor!!!)… vamos, que me he visto a mi mismo y a mi pareja retratada en los comentarios de este (y otros) post de este blog (Sylvia hay que hacerte un monumento!!!).
Sólo me queda conseguir que a mi pareja le apetezca leerse el libro de Sylvia, entonces ya seré 100% identificado.
Buff, q nivelazo hay por aqui!
Bueno, no sé si mis impresiones le servirán a alguien pero una gran escritora, de la q me estoy empapando con su último libro sobre el Deseo me ha pedido q comparta con vosotros un par de cositas.
Aunque lo único q he hecho ha sido empezar a leerlo, ya esta haciendo efecto en mi. Me explico: los vergonzosos listados de comportamientos, conductas, boicots, etc. q se dan entre las parejas, en las cuales existe algún miembro internamente “cabreado”, son desgraciadamente un puro reflejo de la realidad. Me doy cuenta de lo q he hecho en el pasado, de lo q se me ha hecho y ser consciente de todo ello y verlo por escrito, me hace sentir, por un lado, mal por reconocerme/le, por otro lado, bien, pq estoy al principio de una nueva relación y todo esto me ayuda a no repetir errores del pasado.
Un saludo y q tengáis buen sexo!!!
Lo del aquí-te-pillo-aquí-te-mato tiene para mí personalmente un morbo, que casi se pierde completamente cuando la situación de ‘zozobra’ desaparece.
Es un aliciente añadido, es un incremento del deseo, cuando hay dificultades para verse una pareja, hay sensación de menos deseo, o digamos una recuperación del deseo más lenta, cuando las condiciones son ‘favorables’: ya tenemos picadero, casa, oportunidad diaria, al final llega a aburrir…
Amigos, no se puede comer caviar y beber champagne a diario, al final lo aborreces. Es mejor ir cambiando a unas almendras con un vino, al día siguiente una ensaladilla con una cerveza, y el día que repites el caviar, pues ya alucinas…
A mi parecer, la difícil tarea de la monogamia, siendo fiel claro, sino hay trampa.
En el swinger (intercambio) siempre hay sorpresa. Algo que me gusta especialmente además del acto en sí, es la comunicación abierta que hay, sin tapujos.
¿Cómo dices? Es que no acabo de entenderlo. esa primera frase se las trae. Lo explicas un poquito más. Bueno, lo explicas si te apetece. Por cierto, José Bustamante saldrá este viernes en Espejo Público (Antena 3) hablando de la web Ashley Madison que se dedica a poner en contacto a gente que quiere se infiel. Le invitaremos a que nos explique cosas.
Creo que la monogamia, como antes dije, sin trampa, es extremadamente difícil. Es muy complicado mantener una chispa, deseo, explorar, conocerse, imaginación… hasta que la muerte nos separe y con la misma persona.
En el sexo también se evoluciona y buscas aunque sea pequeñito, un aliciente. Hay muchos recursos, pero pienso que en algún momento, aunque sea de pensamiento, te gustaría pasar la barrera de “lo prohibido”, que te vuelvan a conquistar, coquetear, conocer a más gente, cosas nuevas. Que te lo digan otras personas, con el consentimiento de tu pareja, (hablo de mí, en este caso, pero igual para mi pareja) ya no lo sientes como un cumplido y… es diferente, no es comparable.
No es nada nuevo y que nos pille de susto, que más de un@ ha tenido ese tipo de coqueteo aunque sea online. Tengo muy claro que la infidelidad está a la orden del día, pero es algo que no consiento, y aunque existe en el swinger, yo no le veo sentido. Ser infiel es mentir, y la otra persona está en desventaja, cuando podrían disfrutar ambos, quizá, con esa situación.
En algún momento (puede ser a los 40 ,50 ,60 ,70… ¿?), nos cansamos, nos dejamos y esa chispa se va desvaneciendo. Con el intercambio, esa chispa, según mi experiencia, aunque el tiempo me dará o quitará la razón, se mantiene viva, y con ello la ilusión de seguir cuidándote para estar y sentirte guapa.
Me llena de admiración cuando en ocasiones encuentro personas de avanzada edad jugando como chiquillos.
Ésta es nuestra opción, habrá muchas otras posibles. Cada cual busca a su manera, la forma de mantener viva la chispa.
leo que nosotros tenemos que “currarnoslo” que debemos de darle “algo más” a nuestra partenaire para que ella consienta tener sexo…… creo que me he perdido algo o lo que leí en cierto apartado del libro de Sylvia me lo he imaginado o se os ha olvidado.
Me queréis decir que las mujeres no sois capaces de tener sexo por el mero hecho de disfrutar del sexo? NO ME LO CREO!
Lo que creo que es que viene bien aprovecharse de nuestra “desesperación” 😉
Fati, lo de las notas….una propuesta a algo sugerente, un sms, un postre especial, una sorpresa a modo de cena especial…..son tantas cosas, y a veces ayudan tanto, yo en mi caso particular, y mas con el paso del tiempo, tiendo a pensar que quizá no hice las cosas bien en el pasado, como dice Hernan, la rutina a veces, que digo a veces, siempre acaba matando o al menos diluyendo poco a poco la relaccion, y estoy con sylvia, en eso de que hay multitud de formas y maneras de practicar, o tener sexo, pero sylvia, o yo me expreso mal, o me lo curro poco, pero llevo promoviendo eso que comentas durante algún tiempo, y nadie me ha dicho, joder, llevas razón !! hay otra posibilidades de…
será que todos y todas pensamos en una única manera de hacer y tener sexo? habrá que seguir buscando a aquella mujer que vea que te lo estas currando?
Aprovecho para enviarte suerte para la presentación en tierras Mañas, a ver cuando te pasas por Santander, que tengo ganas de que me firmes el libro, y ya de paso darte dos besos !!
(no pido mucho verdad) 😉
Bueno, Sylvia, si vamos a aplicar una noción extensiva de “sexo”, casi podríamos decir que todo lo es. Una charla puede ser sexo, o eso de dormirte mientras te acarician… lo cual sería un poco egoísta, no?? Tú te curras el masaje, y yo me sobo jajajajajja… y la otra persona, si se ha excitado, cómo se queda?? Y está claro que me refiero a una experiencia sexual física completa (juego, estimulación, penetración, etc, etc, etc) lo cual SÍ implica sudar 😉 Quizá el problema es que mi concepto del sexo, tal como lo hacía antes, implicaba horas, muchas horas… tal como está mi vida ahora mismo, no puedo ni planteármelo.
Pero tal y como me dijiste tú a mí, no me leas siempre en forma literal… provocar y ser un poco abogado del diablo tiene mucho morbo jejejejeje
Por cierto, sabrás por Facebook que mi hobby es la astronomía y participo en el programa SETI, o sea que si vienes de otro planeta, me das la exclusiva, vale?? jajajajajajajaja DIOSA!!
Señor abogado del diablo, le comento una cosa, si no le importa mucho 😛
No sé si esto puede servirte de ayuda o no, pero te lo comento y ya haces con eso lo que quieras 😉
El problema ese que comentas (entiendo que lo manejarás y no te irá la vida en ello, pero aprovecho la excusa porque a mí e ayudó) de que el concepto que tenías antes del sexo no es muy compatible con tu vida actual, es parecido a uno que tenía hasta hace no mucho.
Hace poco me hicieron ver que aunque antes me conocía mucho, había cambiado y seguía teniendo la misma imagen de mí mismo. Pero había cambiado, todos cambiamos. Como me decía esta persona que me abrió los ojos, nuestra manera de entender el sexo, de sentir, de disfrutar, cambia. Y de hecho es lo bueno, eso hace que sea más complicado aburrise. Siempre hay cosas nuevas que descubrir.
La cosa es que cosas que antes me gustaban mucho ahora ya me daban un poco igual, cosas que era capaz de hacer, ya no, pero cosas que antes no me excitaban, ahora lo hacían mucho. Pero el problema era que no era consciente de todos estos cambios (por mucho que creía conocerme…).
Una vez lo entendí y acepté mis nuevas circunstancias, disfruté muchísimo más y todo ha ido cada vez mejor.
Con esto quiero decir que lo que antes era bueno o lo mejor, igual ahora no tiene por qué serlo y que si los gustos o las circunstancias cambian podemos adaptarnos.
Como dijo alguien (creo que Darwin), «el ser humano no sobrevivió a los dinosaurios por ser más fuerte o inteligente, sino por su capacidad para adaptarse».
Seguramente la cita está mal, pero se pilla la idea, ¿no?
La cita es correcta, aunque no literal, pero da igual Juanje.
Nos creemos muy inteligentes, pero lo que en realidad nos salva una y otra vez es nuestra capacidad de adaptación.
Daos una vuelta por Burgos, Museo de la Evolucion y Yacimiento de Atapuerca. Es realmente espectacular, a mí se me ponen los pelos como escarpias.
No, el concepto no, me he explicado mal. Simplemente que yo invertía muchas horas haciendo el amor, creo que es la mejor forma de disfrutar los dos. O sea que lo que ha cambiado es la posibilidad de hacerlo (no lo concibo en plan perro, 4 minutos y sanseacabó), no el concepto.
Hernán, tú siempre diferente. Es verdad que estar reventado no es el mejor aliciente, pero no todo sexo implica correr los 100 m. lisos en 9 segundos (bueno, no sé lo que se tarda), ni una maratón. Hay sexo pausado, sexo yo te toco para ayudarte a relajarte y recordar que en la vida no todo es curre, sexo hasta que te duermas acariciado por mis manos…
Chico, es que tal como lo dices parece que todo sea sudar como un loco. ¿Acaso no es sexo todo lo demás? Yo es que debo ser muy ingenua o llego de otro planeta, pero ese sexo es tan maravilloso o más que el otro. Depende del día q tengamos quiero juego, amor, sordidez, cariño… No soy una, nadie lo es.
No debería escribir esto, pero… si un hombre se esfuerza tanto, si se preocupa tanto, ¿cómo es posible que su pareja no se dé cuenta? ¿Cómo es posible que nosotras no nos demos cuenta de que detrás de esa petición hay mucho más que sexo? Me pregunto si ella está captando que en ese ruego hay un “necesito que me quieras, que me demuestres que me quieres follándome”. ¿Tanto nos cuesta chicas? ¿Tanto?
Y respecto a la pregunta de Al: yo querría que me hiciera sentir valiosa para él. ¿Cómo? Respetando mi trabajo (aunque gane menos, es importante para mi), compartiendo realmente las cosas de casa y de los críos (en serio, no en plan ayudita), respetando que necesito tiempo para mi sola (llévate a los críos, anímame a que salga con mis amigas, que haga cosas…), mostrando interés por lo que me interesa a mi, buscando aficiones comunes, tratando a mis amigas como reinas, haciéndome partícipe de tus cosas, cuidándome como yo te cuido a ti…
Y si te refieres al sexo, creo que toca hablar y te recuerdo lo que ya te escribí una vez: que no haya reacción ES una reacción. Lo que te has de preguntar es si la das por buena.
Lucas eres un terminator… me he quedado obnubilada con tu deconstrucción. No sé si animarme a restar por un lado y sumar por otro o tiro ya la toalla!!! Jajaja
Eva, la que nos sube canciones, comparte mandamientos y ama con locura a su hombre… te necesito. Necesito tu positividad. ¿Qué hacemos con tanta pereza?
“¿tanto nos cuesta?”.
Sylvia:
al final es todo por exceso de egos, por ambas partes, que nos lleva a una estúpida guerra sin cuartel por el “quien vale más”.
Victima número uno de esa guerra absurda: la pareja.
Yo e tenido unos largos correros con nuestra amiga Sylvia, y despues de leer su libro deseo e entendido muchas cosas que hacemos mal los hombres y que te digan que no, no significa que ya no te quiera, o que tienen a otro.
Si es cierto que yo estoy haciendo caso de todos los consejos que me dio Sylvia, pero a veces se me hace muy cuesta arriba por que no veo respuesta por parte de mi pareja.
Las espectativas que nos autoinfundamos los hombres incluido yo creo que son muy grandes y cuando nos damos de golpe con la realidad, duele jaja.
Yo seguire luchando por que mi relacion siga viva y hare todo lo que este en mi mano.
Todas hablan de que el hombre debe “currárselo”. Y vosotras qué?? Claro que el estereotipo de que somos gorilas primarios que follaríamos en cualquier circunstancia es cómodo (como todo cliché, evita la necesidad de pensar un poco), pero no cierto. Será que no soy un chiquillo (estoy mucho más cerca de la tumba que de la cuna) y que mi trabajo me machaca física y mentalmente (aunque me guste), pero si alguien estuviera conmigo tendría que “currárselo” muuuuuuuuucho para lograr que mueva un dedo, y os juro que no soy mujer 😀
En eso te doy la razón. Ellas también se lo tienen que currar. Que se suelen quejar de los estereotipos masculinos, pero también suelen fomentarlos con expectativas de que cumplamos ese rol.
Creo que habría que hacer un poco de examen de conciencia y reconocer que ambos nos lo podemos currar un poco más…
Suscribo al cien por cien a Hernan y Juanje en estos dos últimos comentarios.
Creo que están más que claros lo defectos masculinos, se han enumerado y repetido en varias ocasiones en este blog.
Ahora, chicas, os toca a vosotras salir de vuestra burbuja de Princesas y poneros a nuestra altura, de igual a igual. La pasividad con la que se os ha condenado históricamente a vivir el sexo ya no puede funcionar en un mundo supuestamente igualitario.
Todos somos culpables de pereza.
Y nosotros, con nuestras taras y defectos, también necesitamos cariños y amores varios.
Bes@s a tod@s. Bienvenido José Bustamente.
Jesús, cielote, creo que en “Deseo” he sido dura con las mujeres -el mea culpa es visible- y aquí no me he quedado corta. Pero, en fin, pronto subo una crítica a la mirada femenina de la pareja o mejor aún subo un post sobre qué necesita un hombre para considerar a una mujer una buna amante. O los dos. Esta semana la tengo difícil, es la última de bolos, me queda un viaje a Sevilla, ¡que me servirá para conocer a Juanje! (no se libra) y, después, prometo dejar fe en el blog de que somos malas, muy malas.
No sois malas, sois complicadas y contradictorias, lo que es parte de vuestro encanto. A vuestro lado, muchos tíos son el Seat Panda de la evolución. Si eres atento, la ahogas, si no lo eres es porque eres un desapegado e insensible; si estás pendiente de ella “invades su espacio”, si no es que pasas de ella; y así ad infinitum… pero no pasa ná!! Que os amamos igual!! 😉
Se agradecera eah!!! Sevilla y Olé, jajaja, la calorina que te espera. Animo!!!!
(y como dice Juanje, tampoco es que seais tan malas, no paseis de un extremo a otro, no os autoflageleis en exceso)
Estamos generalizando, y eso no es bueno. Hay muchos factores que intervienen. El cansancio en ambos casos está más que claro, y no hay más.
Sin embargo si apartamos ese factor entra en acción la parte emocional de las mujeres frente a la sexual de los hombres. Obtenemos estímulos previos de diferente forma, hasta ahí está claro. Pero eso tampoco es generalizado, conozco mujeres que en situaciones de estrés y cansancio necesitan sexo para relajarse y descansar bien.
También creo, y es algo de lo que se ha hablado mucho, las mujeres no tendemos a soltarnos por el pudor de que nos tachen de X. Hay otras sin embargo que dan rienda suelta y aunque no muy a menudo por circunstancias, cuando surge puede ser más guarrilla, si cabe, que él. He de decir a favor de ellos, que nosotras tendemos a piropear menos. ¡¡¡Tienes un polvo que no te lo quita ni Don Limpio!!!!
creo que todo es cuestión de apalanque, como ya nos tienen, bajan la guardia y se pierde la magia del flirteo y de la conquista, un pequeño detalle todo y ellos quieren sexo aún después de una pelea….creo que nosotras necesitamos más curro previo para poder dar más de nosotras y tb ser nosotras las que buscamos, eso sí falta motivación a veces!
Por los comentarios y por experiencia propia, se que la rutina es el mayor detonador de relaciones que hay (en la mía está haciendo verdaderos estragos).
Y propondría una pregunta (para ellas), como os gustaría/gusta que vuestra pareja rompa la rutina? que cosas os hacen soltar un “anda, este tio se lo está currando!!” que cosas os harían ver que algo está cambiando y debe de seguir cambiando?
a mi me gusta recibir algo inesperado, alguna sorpresa que se salga del guión de mi cumpleaños, aniversario, reyes magos…eso es salirse de la rutina! ejemplos te pondría muchos y no me refiero a cosas materiales, si no a hechos. Eso es currárselo. Yo a mi chico alguna vez le he dejado una nota sugerente debajo de la almohada y cuando se ha ido a dormir lo ha hecho con una sonrisa en los labios… No sé, cosas así.
No es necesario grandes sacrificios.
Yo echo en falta cualquier cosa sin coito. Caricias a cualquier hora, no sólo a partir de las 21:00 H. Ya que todo tiene que ser con, sino se pone de mala leche.
Ese NECESITO hacerlo, igual que come o hace cualquier cosa rutinaria. Para mí ya es una obligación, y lo haces o hay mosqueo por semanas. De vez en cuando, pues tengo negocio propio, hago horas extras, y después de cerrar el negocio, hacer la cena y acostar a los niños, sigo trabajando hasta tarde. No le importa ¿Y él cuando?
Un aquí te pillo, pues sólo le va en la cama. Me parece muy egoísta, soy una persona muy muy abierta, comprensiva y tolerante (o al menos me veo así). Nos casamos muy jovencitos y hace unos años me dí cuenta que somos dos polos muy opuestos, aunque cuando “lo tengo atendido” es casi todo genial. Pues no podemos hablar de grandes cosas, ya que no coincidimos en casi nada. Con que respete como soy y yo, y yo lo respeto a él, de momento ahí vamos con el tira y afloja.
¡Ya me desahogué!
Ojalá consiguiese que echase menos horas a la televisión y quisiese leer Deseo. Pero es muy vago, para lo que quiere.
Hola José. Muchas gracias por escribir esto, me has abierto los ojos mucho sobre el tema masculino. Igual que nosotras intentamos que nuestros chicos nos comprendan, la base es comprenderlas nosotros también a ellos, osea, entendimiento mutuo! Sobre el tema de los flirteos previos a una relación en la que el hombre se lo curra muchísimo (vuelvo a barrer para mi casa), tiene la culpa la desigualdad de género (se esperan del hombre unas altas expectativas, vamos, todo el trabajo para él,; mientras que nosotras andamos esperando pasivas a que él de el primer paso; o establecer la premisa de que cuanto más me haga la interesante más en el bote lo tengo). Soy muy joven, y te puedo asegurar que sigue ocurriendo, aunque en mi caso no me ha gustado nunca hacerme la interesante ni la pasiva, he sido muy impulsiva (con sus cosas buenas y malas), en mi primera cita con mi actual pareja, bastó con que me rozara el brazo para derretirme, al igual que le pasó a él. Igual algunos pensarán que es bonito alargar ese tiempo de flirteo, como en las pelis románticas, pero no es mi estilo (el mundo me ha hecho así).
Llevo 7 años de relación y doy fe de que hay que currárselo mucho (los dos) para no caer en la rutina, y aun cayendo en la rutina porque es inevitable, me da horror verme más mayor, viviendo con mi pareja, con una situación en la que se deja el sexo de las últimas prioridades. La vida que nos toca vivir quizás nos lo ponga en bandeja, pero sigo diciendo que igual que tenemos tiempo para salir de cañas, ir de compras o ir a la peluquería, podemos invertir algo de nuestro ajetreado tiempo en el sexo, una inversión con beneficios de los buenos, por cierto 🙂
Y sobretodo comunicarnos, que empleamos creo yo demasiado lenguaje no verbal que a veces entre las parejas es dificil de identificar…
Gracias Fati por tu comentario,
Comparto contigo esa perpetuación de los roles, de lo que se supone que tenemos que hacer nosotros y lo que se espera de vosotras, enhorabuena por ser capaz de salirte del guión, a vosotras os ha tocado recibir mucho más castigo en relación al sexo y por desgracia no existe todavía una liberación real de esos ataques.
Me ha gustado lo de la comunicación, es verdad que lo “mágico” es que entiendas lo que quiero decir sin necesidad de hablar de ello…pero cuantas veces nos equivocamos por ir de adivinos/as!!!
Me encantaron tanto el artículo como cada uno de los comentarios..
NO sé si es porque estoy atravesando una etapa donde “lo veo todo negro” pero,me parece que nos hemos perdido en algún punto,de todo este largo camino de sexo con y sin parejas fijas.
No sé, es difícil intentar encontrar el punto donde todo empieza a ir cuesta abajo,o si no cuesta abajo,entramos en una especie de marasmo,de purgatorio,donde no nos pasa nada.
Hablamos distintos idiomas? Queremos diferentes cosas? Verdad que no?
Entonces?
Donde nos perdimos?
Porqué si ambos sexos queremos disfrutar,tener una vida plena sexual,no podemos? Es tan lineal como que “no queremos”? O somos “egoístas” o entablamos “luchas de poder”?
Uys,no me hagan caso,que hoy me levanté con la pata izquierda.
El artículo me pareció interesantísimo,y el hecho de contar con una visión masculina,que hable de lo que les sucede a los hombres,puede ser un punto de partida y acercamiento.
Gracias Sylvia, gracias José!
Hace poco comprendí que para que una pareja funcione, el otro tiene que valorar y necesitar lo que somos, es decir que cada uno en la pareja aporta lo que el otro necesita.
Cuando hay parejas que no coinciden en sus aportaciones, o no pueden ofrecer lo que el otro necesita, lo mejor es buscar otra pareja.
Ahora lo queja masculina es siempre la misma, las mujeres fallan siempre en el sexo, o no es suficiente o no es bueno o no gusta.
Pero no será que en el inicio de las relaciones, el hombre es más galante y dulce, más dedicado dialogante. Creo que en la convivencia esto ya no existe.
Como leí en un comentario anterior, muchas veces nuestra pareja en una cena, pasa otra mujer en el restaurante y hay que esperar que termine de mirarla, para continuar la conversación, ya les cuento que por mi parte, seguro que no me apetece más nada, con esa persona por un tiempo.
Para disfrutar de una relación necesito tener ilusión, sentirme por un momento fantástica, que gusto y que me gusta, y no como pasa a veces que después de un día anodino, la seducción es una mano entre las piernas, la verdad no sé a quien le pone esto, pero a mi no.
Los hombres se quejan de carencia de sexo, pero la verdad que las motivaciones, son muy pocas, por lo menos personalmente no funciono así, necesito un momento de encuentro, de ternura, de acercamiento, que me haga sentir placer y no obligación.
Estoy totalmente de acuerdo contigo. Eso suele pasar, a los hombres nos suele pasar eso, porque nos acomodamos. Quizás como comentan más arriba, porque creemos que ya tenemos asegurado el sexo y que no hace falta volver a currárselo.
Pero quizás a ustedes también le pasa algo parecido, ¿no? Muchas mujeres cuando tienen pareja ya no sienten que tengan que seducir a su pareja, ni ponerse tan guapas como se ponían antes. «Total, él me quiere como soy y hay confianza para vestir de cualquier forma en casa».
Que sí, que es cierto, pero de vez en cuando es necesario currárselo un poco, ¿no? Para no caer en el que seamos tan familiares el uno para el otro que ya no nos llame nada la atención de la otra persona.
Hola Montse, no estoy de acuerdo contigo. De tu comentario, creo que hay dos temas:
1) El sexo deberías querer tenerlo por ti misma. El sentirse especial, ilusionada, motivada, etc., son responsabilidad de cada uno. No puedes responsabilizar a tu pareja de tu motivación, igual que no puedes responsabilizar a tu pareja, de tu deseo sexual.
2) El deseo o atracción hacia otras personas, cosas. Lo que te gusta te gusta. No puedes evitarlo ni dejar que sea como es. No puedes pedir a tu pareja que le dejen de gustar otras personas, pero si puedes pedirle que modere su conducta. Lo explico de otra manera: Si te gusta el chocolate, no puedes hacer que deje de gustarte. lo que puedes hacer es controlarte (auto control) y no comerlo. las razones son propias y exclusivas de cada uno: hay quien le apasiona el chocolate, pero no lo come por que engorda; hay quien le apasiona el chocolate, pero no lo come por que le salen granos; y hay quien le apasiona el chocolate y no se priva de comerlo siempre que quiere.
En conclusión: Si te molesta que tu pareja mire a otra, lo que tenéis que hacer es hablar, no enfadarte. Si no te convencen sus dotes de seducción, lo que tenéis que hacer es hablarlo, sugerirle, incluso educarle, pero no enfadarte.
… hola !!!!
interesante post !!!!
desde que soy viuda… me dedico a observar (nunca lo había hecho), cuando voy a un restaurante el comportamiento de las parejas, que comen solos, (siempre sin generalizar), me doy cuenta, que habitualmente, cada uno está en lo suyo… no se ven grandes ni interesantes conversaciones… ellos tienden a mirar a las mujeres que pasan a su lado…. se denota (sin generalizar repito ) un cierto tedio en las relaciones que se intuyen de muchos años….. !!!
alimentar ilusiones… en la pareja y en todo… es algo que nos cuesta ??? será eso ????
Pero mira… puedes tener largas conversaciones… con tu hermana, con una amiga o con tu profesora de Saolin kung fu. Pero amiga, el sexo es otra cosa!! (entre otras cosas, porque tiene una parte física. Tras una jornada laboral de las chungas no pienso en NADA que no sea comer y dormir). Basto que es uno, oye 😀
Estoy de acuerdo que tras una larga jornada laboral no apetece casi nada, pero también es verdad que casi siempre (si tu trabajo es muy físico, evidentemente no es el caso) el cansancio ese es más mental que otra cosa y que muchas veces se recuperan más energías activándose, que tirándote al sofá o a la cama.
Recuerdo épocas en las que no hacía casi nada, ni salía porque estaba currando todo el día y terminaba muerto. Pero me dió por probar a hacer alguna actividad (correr) y de repente tenía mucha más energía y me sentía menos agotado. Incluso empezaron a apetecerme hacer más cosas en vez de comer y dormir.
En el sexo también me ha pasado algo parecido. Al fin y al cabo, es como dices, una actividad física y cuesta romper la inercia de salir de currar y sentirte sin fuerzas para nada.
Que buena lectura…
Gracias por darme la pista para conocer al Sr Bustamante, veo reflejo en muchas de las cosas que propone. Me hizo recordar, y sonreír.
Recuerdo en mis tiempos mozos muchas anécdotas y sitios, que se deberían publicar en una biblia del soltero, (un aparcamiento chulísimo en lo mas alto del Tibidabo, una cala escondida en el faro de Santander) ainss que recuerdos mas hermosos, también la de ahorrar para salir de casa a un hotel, y encontrarte en el aeropuerto de destino con la madre de ella, 😉
Pero llega ese momento, compartir, y ahí si llegas con falsas expectativas, estás “jodido” también he llegado a creer, que sería el sexo perfecto, tranquilidad, más comodidad, menos nerviosismo, y en muchas ocasiones, fue todo lo contrario !!
En esto del amor y el sexo, no existe aún el manual para que todo salga a gusto del consumidor, pero si compartes, disfrutas, te sinceras y relajas, tanto en un coche como en una estupenda cama, pasando previamente por el intenso centrifugado de una lavadora, seguramente que estaremos todos, muchísimo más satisfechos !!
Disfrutar del placer es el mejor de los pecados.
El tibidabo, una cala en el faro de Santander….creo que sería interesante esa biblia de soltero o más una especie de lonely planet de lugares para el amor carnal.
Lo del lonely planet me lo apunto !! si alguna vez profundizas en el tema, puedo aportar unas 8 docenas mas de sitios, repartidos por la ancha castilla, incluso algunos en el extranjero…lo siento, soy de los que se compro tarde la casa…;)
Pd: lo de las 8 docenas, no está escrito en euskera !! pero eso si, casi siempre con la misma pareja de baile, ya me gustaria a mi que……. 😉
Jejeje, pues pues casualmente hace tiempo alguien pasó algo para esto en el curro 😛
http://mispicaderos.net/
Tienen hasta aplicación para el móvil, así que será por sugerencias de sitios 😉
Muy bueno Juanje, lo vi ayer por FB, muy bueno !!
El cuerpo es sabio y se adapta siempre a lo que das, por tanto menos sexo, menos ganas….. y llegado este estado, es un “trabajazo” echar un buen polvo, o hacer bien el amor (depende que lo que apetezca ese día). Pero como habéis dicho, hay que trabajarse las cosas, y a veces es tan simple como unas caricias en la espalda o trasero mientras se leen unas paginas antes de apagar la luz. Desde luego causa mucho más efecto eso en la mayoría de nosotros que el encontrarnos de repente la mano entre las piernas…..
Juanje estoy dándole vueltas a tu pregunta: “… ¿y ellas? ¿no les pasa lo mismo? Es decir, ¿a ellas no les frustra pasar de un sexo desenfrenado a que sea algo muy raro y esporádico?”
Y, aun a riesgo de que me tiren la caballería encima, te diré lo que pienso: me temo que, para su desgracia (la de ellas), a la mayoría de las mujeres NO les pasa exactamente lo mismo. Mira el comentario de Hernán: lo que dice escuchar en su trabajo. Yo también oigo y leo (muchos emails) comentarios del estilo.
Me temo que las chicas seguimos con el chip de que el sexo lo “desarrollamos” en respuesta a a llamada del hombre… De hecho, una de las razones para aceptar un acercamiento es “ya toca”, es decir, la culpa, el deber… La mayoría aún no hemos entendido que tenemos un cuerpo sexuado para gozarlo, para exprimirlo sexualmente y sentirnos vivas… ¡vibrar gracias a él!
Sin embargo, no creo que debamos culpabilizarnos (= perder el tiempo). Mejor plantearse ¿cómo es posible que viva esta cuestión con tan poca alegría?, negarse a seguir por ese sendero y hacer algo al respecto.
A mi no me cabe duda: si cogemos dos mujeres con vidas muy parecidas (pareja, hijos, trabajo…), la más feliz es la que vive su sexo con alegría. Es más, le da sopa con ondas a la otra y se nota a la legua que es una tía hecha y derecha. Completa. Y, por supuesto, las parejas más felices que conozco son las que ejercen con alegría. Con altos y bajos, como todo en la vida, pero con ganas de no ceder… hasta el último aliento.
🙂 Tal cual…(pero,si lees el último post mio aquí,digo casi lo contrario..) No me hagas caso..
Creo recordar haber leído en algún otro post, porque no se dedica la misma energía post-pareja que ante-pareja a la misma. La respuesta es sencilla, se llama vida. El día tiene 24 horas y como priorizamos el uso de las mismas es lo que da relevancia a unos u otros aspectos de nuestra vida.
El trabajo, las relaciones sociales, la familia, el descanso, la pareja son las cosas en las que invertimos nuestro tiempo, el equilibrio gestionando este tiempo es la clave y yo creo que aquí es donde más nos diferenciamos los dos géneros.
Esto son opiniones, cuando pasamos a tener una pareja:
– “el trabajo” es el que menos sufre porque bien que mal comer tenemos que seguir comiendo (sustitúyase por “el estudio” dado el carácter obligatorio donde se considere)
– “las relaciones sociales” que son sacrificadas masivamente en el tiempo de conquista son recuperadas poco a poco en detrimento de “la pareja”
– “la familia”, entiéndase por progenitores & cia y descendientes, cede parte de su tiempo a “la pareja” hasta un punto de equilibrio que vuelve a desequilibrarse y resta mucho tiempo cuando llegan los descendientes aumentando el tiempo de “la familia” a cotas anteriores a “la pareja”
– “el descanso” es el que más bandazos sufre y el que cede generosamente primero a “las relaciones sociales” y el el tiempo de conquista a “la pareja”, generalmente es el último en recuperar su tiempo natural, casi siempre se sacrifica, como consecuencia estamos menos dinámicos, animosos, ect… sufre horriblemente cediendo ante “la familia” cuando llegan los descendientes
– “la pareja” puesta adrede en último lugar porque casi siempre es la última en llegar a nuestra agenda de vida, experimenta un subidón de tiempo dedicado en el tiempo de conquista, para posteriormente ir devolviendo tiempo a las otras actividades de la vida, el ritmo de perdida viene dado por circustancias diversas pero quizás el más importante es el que cede a “la familia” cuando se tienen descendientes, el punto de equilibrio de sus relaciones con los otros aspectos de la vida es lo que lleva al éxito o al fracaso de “la pareja”
Dentro de “la pareja” a su vez, hay diversos aspectos que van tomando diversas porciones del tiempo de la misma, “el flirteo”, “los cariños”, “el sexo”, “la comunicación”, etc… Si a “la pareja” en un comienzo se le aporta todo el tiempo posible, dentro de esta “el sexo” es en el que intentamos invertir todo el tiempo posible, conforme avanzamos en la relación, el tiempo que “la pareja” va cediendo a otros aspectos sale principalmente de “el sexo” y también de “la comunicación”.
Es gracioso como muchos hombres se crean expectativas elevadas respecto al sexo y se frustran pero como muchos más lo hacen por la comida y no van a “comidólogos” o directamente se apuntan a unas clases de cocina 😉
Nota: quien dice tiempo dice energía. Sed generosos con vuestro tiempo pero siempre guardad un poco para quien os ama.
Totalmente de acuerdo con Juanje. Somos VAGOS. ¡Menos tele y más tela! También suele pasar que uno curra más que otro, y ese otro, se deja hacer. ¡¡¡Esto si es vida!!! pero sólo para 1.
Tienes razón… yo, cuando llego del curro, no estoy para nada, ni física ni mentalmente. Aunque me esperara la Belucci en la cama le diría “anda, quita, que estoy reventao” jajajajajajajaja
Tienes razón Isabel, vemos a diario en consulta como la pereza es uno de los enemigos principales del sexo…pero fíjate, eso cambia cuando aparece alguien…de hecho muchos hombres o mujeres que han sufrido una infidelidad se quejan de lo que su pareja ha estado dispuesta a hacer para poder estar con el otro.
Es evidente que la novedad es una excitación mucho más sencilla, cómoda, sin esfuerzo….habría que pensar sin embargo la carga emocional que supone una ruptura…quizás así lucharíamos más por reavivar el fuego que tenemos antes de que sea demasiado tarde
Es por eso que es tan interesante montarse un teatro, como dice en el libro DESEO. Hacer el papel de ser desconocidos en situaciones nuevas. Es muy divertido, aunque también es cierto que niños, trabajo, casa… ya de por sí es mucho el esfuerzo como para sacar tiempo y ganas de montar el escenario. En estos casos, me gusta un aquí te pillo, pero aquí y ahora, sin peros. 🙂
En mi caso, echo en falta la imaginación. Es por eso que me refería antes a lo de “trabajo”.
Me encuentro identificado 100%.
Pero además no sólo porque yo me haya planteado todas esas fantasiosas expectativas de que “en cuanto tengamos nuestro hogar nos vamos a poner las botas” no…. ella también se encargó de ello, en muchas de sus negativas venía acompañado un “no te preocupes, que cuando tengamos el piso lo vamos a pasar bomba”, si, ya…..
¿Por qué narices somos tan complicados y tan imbéciles? (ambos, ellas y nosotros)
Y no disfrutas de los sábados de limpieza general?
😉
Jajajaja…
Muy agudo Lucas. Eso digo yo, podemos ocuparnos de la compra, la colada, limpiar el retrete (arcadas me dan) ¿y no podemos ocuparnos de pasárnoslo bien?
Mal vamos.
Al, campeón, tu no cejes en tu empeño. Invita a tu chica a la web. Pero con humor… nada de presiones. Presionando sólo asustamos a la pareja.
Eso digo yo, a veces ella ha preferido planchar que hacerlo, y como es lógico….. uno se viene abajo en 0’2 porque entra en la espiral de preguntas-acusaciones “ya no le gusto, ya no le atraigo, ya no le pongo, hay otro, ya no me quiere…. etc… etc… etc…” con la de veces que le he dicho “deja eso para luego y te ayudo yo a hacerlo” pero nada, que no hay manera.
Respecto a lo de que vea tu web… no he sido capaz por activa y por pasiva de que empiece a leer tu libro…. complicado lo voy a tener con tu web, pero por intentarlo que no quede!
Pues por suerte o por desgracia no, ya que la gran mayoría de los sábados… me toca trabajar, 😉
Me alegra AL haber podido plasmar un sentimiento con el que algunos hombres se reconocen y a la vez ayude a ellas a entendernos, puede que no seamos tan “simples” como creíamos… pero tampoco somos tan complicados/as.
En cuanto a tu pregunta… no creo que seamos imbéciles, ni complicados, pero si es cierto que hacemos imbecilidades y nos complicamos. ¿Por qué? Quizás no sabemos hacerlo de otra manera.
La verdad es que si, que nos encanta complicarnos la vida.
Tengo un amigo que ya ha dejado a varias chicas por lo mismo, el bajón sexual que viene cuando llevas un tiempo juntos, ellas lo interpretan como un cerdo machista que sólo piensa en el sexo, él sencillamente (me lo ha dicho a mi mas de una vez) no quiere estar con personas que no se quieren a si mismas.
Pero claro, ya se sabe, nosotros somos unos simples y unos obsesos que solo piensan en sexo.
Y me planteo yo muchas veces “porque voy a pensar en otra cosa si el sexo es gratuito, placentero, reconfortante, bueno para la salud y encima te une mucho mas a tu pareja?” pues nada, que no lo entienden asi..
Bienvenido (aunque ya te había visto en algún comentario), José, y gracias a los dos porque, como ya le había dicho a Sylvia, echaba de menos un toque masculino a algún post o, al menos, un toque menos femenino.
Más que nada porque hay muchos de los problemas o temáticas que se plantean por aquí que nos afectan a nosotros también. A veces de la misma forma, a veces de otra totalmente distinta.
Y si a mí me ayuda leer la versión femenina del problema, seguro que a más de una le ayudará leer y entender un poco más la nuestra. Al final, mejor para las relaciones y disfrutar del sexo, ¿no? 🙂
Sobre el tema este que comentas he de decir que sí es algo muy común y que veo en la mayoría de hombres que conozco. No todos, claro, pero se podría decir que es una tónica general. El pensamiento mágico es muy peligroso y traicionero…
Pero me pregunto yo… ¿y ellas? ¿no les pasa lo mismo? Es decir, ¿a ellas no les frustra pasar de un sexo desenfrenado a que sea algo muy raro y esporádico?
Quizás los procesos mentales típicos de machito (ya no tengo que perder tiempo, dinero y esfuerzos para mojar, porque ya conseguí pareja) no son iguales en las mujeres, pero entiendo que esa falsa sensación de que ya no hace falta currárselo hace igual de daño en ambos sexos y nos vuelve vagos.
Y claro, si ambos estamos vagos, no nos lo curramos, esperamos que las cosas surjan solas, mucho me temo que en el mundo real (no el de la magia) las cosas no surgen.
Aunque lo peor es que creo que muchos de nosotros (e incluso apostaría que de ustedes, las mujeres) ya dan por hecho que una vez se vive en pareja el sexo decae…
En mi trabajo somos 38 mujeres y 2 hombres, de modo que oigo muchas cosas (ya no se cortan un pelo para hablar por el hecho de que estemos presentes)… y aunque casi todas ellas son menores que yo, he llegado a la conclusión de que decae, y vaya que si decae… el último comentario fue de una que al llegar, esperaba a que el maromo estuviese roncando para irse a la cama, no vaya a ser que tocara “cumplir”!!
Cita textual, añado. El perfil es de chicas de entre 30 y 40 años con un denominador común: haberse casado MUY jóvenes.
Gracias por la bienvenida Juanje! Un placer compartir mis ideas y a aprender con vosotros/as del mundo del sexo y la pareja.
Desde un punto de vista biológico esto es tema recurrente ya, y entronca, a mi modo de ver, con una monogamia, artificial y, en términos evolutivos, recientísima. Como primates sociales somos polígamos (genéticos), veo inevitable el “aburrimiento” del que habla el autor. Esto se suele solucionar con “infidelidades” o “poligamia sucesiva”, dada la hipocresía social imperante.
Por lo de postear, Sylvia, ya tienes mi idea sobre los hombres “poseur” que van de “ositos cariñosos” como estrategia de “caza” 😉
Gracias Herman por el comentario.
Es interesante lo que planteas, es cierto según los estudios que la monogamia sucesiva no es probablemente “natural” pero para muchas personas es deseable, la disfrutan y la anhelan….eso sí, al igual que no es natural llevar a cabo una intervención quirúrgica o tocar el piano maravillosamente bien. Son cosas posibles pero no naturales…opino que al final la monogamia, la fidelidad, el sentirse pleno con una sola pareja, s es algo complicado pero posible con esfuerzo, dedicación y un poco de arte.
Un saludo German y de nuevo gracias
La clave ha de ser no dar por sentado el deseo del otro ni el nuestro propio por mucho amor que sintamos el uno por el otro…o por eso mismo. Un “esfuerzo” para que no se nos gaste el amor “de tanto usarlo” , como decía la canción