1. Mujer, heterosexual, 23 años. Licenciada. Pasé los últimos años de mi adolescencia y los primeros de mi madurez con el mismo chico. Casi seis años de relación que prometía acabar en boda y se quedó en proyecto. Desde que lo dejé hace un año, he sufrido varios fracasos sentimentales, mientras él, que lloraba a más no poder por volver, pudo rehacer su vida en un abrir y cerrar de ojos. Acabó tan feliz y yo tan sola. En poco menos de medio año he probado varias camas, pero ninguna como la última, que es la que me ha incitado a escribir mi historia. Os adelanto que, pese a que por la ilusión inicial parecía que funcionaría, también ha acabado en fracaso.
2. Pese a mi juventud ya estoy un poco cansada de los hombres. Tenía amigas y amigos que llevaban mucho tiempo solteros y me decían “Estoy cansado, me apetece tener una relación”. Y yo siempre les decía “Paciencia, todo llega, aprovecha el momento”. Hasta que me tocó a mí.
3. Se puede decir que soy atractiva. Mido casi 1.70 y tengo buenas curvas. Me suelen decir que mi boca es bastante sexy y que doy morbo. Básicamente, no me puedo quejar de que seduzca a pocos chicos, y no es por echarme flores encima (puesto que mi autoestima tampoco es que sea demasiado alta), pero normalmente no me faltan hombres con los que tener historias. Pero claro, historias que sabes que empiezan una noche y que pueden acabar por la mañana o incluso después de la penetración. Y creo que ya necesito un abrazo, un beso en la frente y una tarde entera en el sofá viendo películas sin argumento, disfrutando de compañía.
4. La relación con mi novio era estupenda, simplemente se me acabó el amor. En el sexo congeniábamos mucho, pero solo nos veíamos los fines de semana y en casa de mis padres o en la de los suyos, por lo que los encuentros eran reducidos y silenciosos, por llamarlos de alguna forma.
5. Después de dejarlo, comenzamos a vernos algunas veces, solo como amantes. Y creedme, las relaciones sexuales mejoraron notablemente. Sería por el morbo de que llevábamos esos encuentros en secreto o porque nos cogíamos con más ganas, pero me ponía muchísimo más y disfrutaba como nunca antes lo había hecho.
6. Pero tras esta relación de follamigo, que acabó cuando él se acostó con una amiga mía unas horas después de hacerlo conmigo, entré en un periodo de sequía sexual que me deprimió bastante. Así que, una noche de verano, aburrida en casa, un anuncio de una página de contactos me llamó la atención y no pude resistir inscribirme.
7. Me daba un poco de reparo ese tipo de páginas, donde buscas pareja por Internet, “no estoy tan mal como para poder encontrar a alguien en la calle”, era mi pensamiento, más por subirme un poco la moral que por convencerme. Pero aún así decidí probar. Durante algunos días seguidos me metía todos los días un rato, hasta que conocí a un chico majísimo con el que empecé a hablar y hablar. En poco tiempo nos hicimos adictos el uno del otro y nos pasábamos el día hablando por Whatsapp o por Skype. Este hecho coincidió con mi marcha: me fui a vivir fuera de España y abandoné la página.
8. Tras varios intentos fallidos por vernos antes de mi marcha, dificultados por horarios y trabajo, fuimos abandonando la relación, hasta el punto de enfriarse bastante. Además, en mi nuevo destino me dediqué a darle varios homenajes a mi cuerpo y sucumbir a los encantos de nuevos hombres con los que solo pasaba de la penetración a la despedida.
9. Pero llegó la Navidad y la vuelta a casa unos días. Ello trajo consigo una cierta melancolía por aquel perfil en la página de contactos. Pocos clicks me bastaron para dar con uno. Algún mensaje y varias palabras en el chat, nos convencieron de que teníamos mucho en común y compartimos rápidamente perfiles de otras redes y números de teléfono.
10. De nuevo un chico de aquella página de contactos llenaba mis ratos libres. Éste último me atrajo mucho más que el primero y congeniamos tan rápido, que en dos semanas ya teníamos la necesidad de vernos, tocarnos, sentirnos y alguna guarrada más. Así que, ni corta ni perezosa, tras algunas promesas de “tengo que ver qué es esto que nos está pasando”, “necesito conocerte ya”, compré un vuelo que me llevaría directa a su vida y más en concreto a su cama.
11. La ilusión por conocernos llenó las dos semanas que nos distanciaban para ello. Yo, enamoradiza como pocas, auguraba un futuro próspero junto a este nuevo descubrimiento. Ilusión que se alimentó por sus palabras de “no puedo esperar más, que llegue ya ese día por favor” y a sus caras de bobalicón por Skype mientras pasábamos una hora de media hablando de todo y de nada diariamente.
12. Y llegó el día. La semana que precedía a nuestro encuentro lo comencé a notar menos afectivo, pero supuse que sería por los nervios del encuentro, o simplemente porque estaba liado con el trabajo. Pero yo cada vez estaba más emocionada y más decidida a dar ese paso. “¡Estás loca!”, me decían a los que se lo contaba, pero yo necesitaba hacer esa locura, estaba demasiado colgada de ese chico tan conocido y tan desconocido a la vez.
13. Nos encontramos en una de las calles principales de la ciudad. Cual película romántica, me llamó porque no me encontraba, hasta que nos cruzamos las miradas uno frente a otro, separados por una carretera. El momento en el que crucé el paso de peatones fue crucial. Él mirándome fijamente, mientras yo pensaba: “Dos besos, abrazo, morreo… ¿qué le doy?”. Un tímido abrazo, y un aún más tímido beso en los labios iniciaron nuestro fin de semana de lujuria.
14. Pero la timidez desapareció nada más llegar a su cuarto. Me tendió en la cama suavemente, y comenzamos a darnos aquello de lo que tanto habíamos hablado. El primero fue algo torpe, como todos los primeros, pero poco tardó en llegar el segundo. Y, a pesar de mis miedos a cómo serían las relaciones sexuales, me sorprendió gratamente. Cansada de polvos de veinte minutos, en los que casi me arrancaban el sujetador y el tanga a bocados para meterla rápidamente, estos fueron lentos, suaves, intensos, de sentirnos el uno al otro… De ponerme cachondísima y hacerme disfrutar como hacía mucho que no disfrutaba. Lo que yo calificaba como polvos románticos, los cuales adoraba, ahora tenía nombre y apellidos y estaban encima de mí.
15. Tras ver que en la cama habíamos congeniado bastante bien, me surgió la duda de “y ahora en la calle… ¿qué?”. Lo que yo imaginaba que sería un fin de semana romántico con todas las letras, pasó a ser simplemente un fin de semana de sexo. Salimos, sí, porque tampoco nos íbamos a quedar todo el rato en la cama, pero como un par de amigos que son a la vez desconocidos e íntimos. Yo le agarraba del brazo, lo abrazaba, y le daba besos: mientras él los recibía tímidamente, pero sin provocarlos.
16. El sexo salvaba las distancias. Era llegar a su dormitorio y desatarse el deseo. A mí ya solo me encendía con el hecho de rozarme bajo la colcha, a él también le bastaban un par de besos para estar dispuesto a todo. Él encima, él debajo, mamadas en las que me esmeraba muchísimo, cunilingus en los que me hacía ver las estrellas. Y unos preliminares que me dejaban tan K.O., que los orgasmos me parecían durar minutos. Yo gemía como una loca, a la vez que me preocupaba todo el rato de que él estuviese bien, hecho que, al parecer, también le ponía bastante.
17. Además de regalarle mis mejores sonrisas, simpatía y … aptitudes como cocinera, le ofrecí mi mayor esmero en la cama. Así que decidí que era el momento de poner las cartas sobre la mesa y tratar el tema de nuestra relación futura. Y aquí es donde acaba mi increíble historia de amor y… el estupendo fin de semana de sexo. Me dice que no es su mejor momento y que a medida que han ido pasando los días, se ha dado cuenta de que no está preparado para una relación. Le gusta como soy, me he portado genial con él y quiere que le abrace, pero no se plantea (de momento) un futuro más lejano.
18. Con algunas lágrimas de tristeza y desilusión, abandoné esa cama y ese cuarto que tanto me había dado y que ahora tanto me falta. Le dejé una nota en la que le agradecía haberme dejado conocerlo, junto a un beso que más tarde me agradeció por whatsapp. Y ya nada ha vuelto a ser igual. Algunas palabras de gratitud y la promesa de que pondrá su vida en orden para no hacer más daño a nadie. Y yo aquí, una vez más, colgada, compuesta y sin novio. Y, por más que lo intento, no consigo que sus cosas malas superen nunca a las buenas.
19. ¿Ahora qué? ¿Espero a que él se aclare?, ¿vuelvo a buscar el amor en esa página de contactos? o ¿dejo que aparezca por sí solo?Y eso …¡que soy joven!
¿Te animas a participar en El Confesionario? Quienes lo han hecho dicen que les ha resultado una experiencia muy enriquecedora. Si te decides, escribe a [email protected] aquello que quieras compartir. Si necesitas más información sobre cómo funciona esta sección entra en “¿Quieres compartir tu historia sexual?”. En la pestaña El Confesionario, encontrarás las entregas anteriores.
: metiéndote en la bañera, por ejemplo, rodeada de espuma comiéndote un trozo de su tarta preferida dándole un toque sensual al ambiente, llévale el desayuno a la cama el fin de semana, etc.
Cuanta gente nos identificamos con tu historia!
Son cosas que pasan y que tenemos que aprender a sobrellevar, el tema que me preocupa es el siguiente:
La mayor parte (por no decir, todas?) de las historias reales que llegan a mis oidos son de MUJERES queriendo recibir AMOR (inlcuyendo sexo, pero no solo esto, sino compañía, pareja, respeto, solidaridad, bah, amor!) y que los hombres no están preparados, no quieren, no les interesa esa mujer, no es su momento, o lo que fuere. Esto me da a pensar…… En algún momento de su vida los HOMBRES buscan, quieren y necesitan AMOR??? O siempre tras de esto está su deseo de tener SEXO y se quedan por cansancio/con quien disfruten mejor en la cama?
Es ya furstrante para mi que muchos digan que todo llega, pero JAMAS escuchar a un hombre en nuestra misma situacion, de querer estar con alguien más allá de sexo casual.. 🙁
Mil gracias por tus palabras. Creo que somos muchas las que hemos experimentado algo así.
Seguro que tenemos suerte, sobre todo si dejamos de buscar. Tendremos que hacer caso a esa gran verdad de “deja de buscar, y lo encontrarás”…pero tarda tanto!
Un beso, y mucha suerte. Ojalá podamos escribir pronto que estamos felices con un tío maravilloso 😉
Me pasé muchos años buscando y buscaba tanto que era infeliz, porque esa parecía la máxima razón de ser, todo lo demás era secundario, mi realidad era lo secundario. Pero mi mente estaba concentrada en la carencia de un afecto que tenía que proveerme de amor y por ende de valía, como si yo no valiera, sin comprender que yo valía por todo lo que había logrado. Como si yo no pudiera prestarme atención a mi misma y mejor que cualquiera, ya que yo me conocía. Como si yo no pudiera darme sexualidad a mi misma, y mejor porque yo podía investigar si no lo sabía, y podía averigüar sólo me faltaba creérmelo. Creérmelo en todos los sentidos y desprenderme de ideas preconcebidas.
Algún día pensarás qué pena haber perdido el tiempo, y haberlo pasado mal por unos pensamientos engañosos.
Mi historia se parece taaaanto a la tuya que me da miedo que llevemos vidas paralelas! Aunque te llevo 3 años pero he vivido casi lo mismo que tú. Excepto lo de las páginas de contacto todo se parece muchísimo.
Sinceramente, respondiendo a tus preguntas y respondiéndome un poco a mí también: hazte un favor y deja de pensar en el príncipe azul que llenará tus días y noches del amor más incondicional que hayas podido imaginar y empieza a pensar en la gente que tienes alrededor y en la que te quiere pero están lejos (yo también vivo en el extranjero). Y, sobretodo, piensa en tí. Está clarinete que no es nuestro momento de estar en pareja, ya hemos cubierto el cupo de momento! Aprovecha para hacer y deshacer lo que quieras cuando quieras puesto que sólo tienes que pensar en tí y en tus metas en la vida. Y, sí, una de ellas es ser feliz con un hombre y tener hijos, pero cariño, somos jóvenes!!! Nos quedan alrededor de 60-70 años de vida y puede que los próximos 5-10 nos los pasemos solas o acompañadas pero no en largos periodos. Vive, disfruta y compara! Nuestro problema es que nos encantamos con la mínima muestra de amor que nos dan y nosotras lo damos todo pero los chicos están viviendo la vida y se ve que se mueren de miedo en cuanto piensan en compromiso (sí, estoy generalizando, pero a mi no me habéis demostrado lo contrario, así que ajo y agua!).
Así que nos toca hacer lo mismo y disfrutar del cariño que nos den y del que nosotras nos damos. Y para terminar, un par de frases de no me acuerdo quien: Quien no pelea por tí, no te merece. Más vale sola que mal acompañada.
Un beso!
A la chica de 23 años, deberías enfocarte en disfrutar el momento y no proyectar nada…a veces esta bueno poder disfrutar con alguien de solamente cama. Saludos.
Gracias, no imagináis los ánimos que dais!
Un besazo ; )
Gracias a todos por vuestros nuevos comentarios. A ver, creo que no queda muy claro en la historia. Yo no fui a conocerlo por sexo, nos gustamos y pasábamos muchas horas al día hablando, sin tocar el tema sexual. Cuando decidimos que yo comprase el billete para verlo, aún ni siquiera habíamos hecho ningún comentario de ese tipo.
Es norma que al irme a su casa un fin de semana, el sexo surgiera, porque además nos poníamos mucho el uno al otro. Pero no fui por tener relaciones sexuales. Básicamente porque para eso me voy una noche a una discoteca. Antes de ese fin de semana había muchas horas de charlas, confidencias, y caras bobaliconas que asomaban algo más de lo que fue.
Si que es verdad que no me quiero mucho, y es uno de mis grandes errores. Tengo que aprender a valorarme para que este tipo de cosas no me superen más. Pero aunque sigo aún pensando mucho en él, ya me he dado cuenta que no se merece ni un mínimo de atención por mi parte. Supongo que cuando venga un sustituto, será mucho más fácil olvidar!
Y bueno, un poco harta de los hombres sí que estoy. Pero de los hombres que se creen que soy solo un trozo de carne, y no quieren nada más allá de un polvo. Y, tristemente, son la mayoría actualmente.
Besos a todos!
Respecto a tu último párrafo “estoy harta de los hombres que solo me ven como un trozo de carne… ” te diría que eso no te debiera preocupar. Lo que la mayoría de hombres puedan pensar o actuar sólo dice de ellos y no de ti. Preocúpate, en todo caso, de clarificar qué tipo de hombre quieres para tí y estate atenta cuando aparezca.
Por mucho que quieras justificar tu forma de actuar en tu primer encuentro, tu comportamiento lo dice todo; decidiste confiar sin conocer. Quisiste creer más en lo que había, en lo que te gustaría hubiese ocurrido.
En fín, tómatelo como un aprendizaje del error perceptivo que consiste que querer hacer que las cosas sean como nosotros queremos y no lo que en el fondo sabemos son.
Desde luego en internet es lo que te vas a encontrar, puede sonar la flauta como alguien ha dicho, pero créeme que por lo general las flautas están desafinadas.
Mirlos blancos, no se donde, jajaja. Claro que los caballeros pueden opinar lo mismo de otros instrumentos musicales.
Disfruta, y sobre todo, ámate a ti misma…y te amarán.
Me gusta el comentario de Paseante.
Pasar del líquido (como sabiamente lo has definido), al sólido conlleva en esfuerzo, un trabajo que en la cultura de la comodidad y del ocio, del… lo quiero ahora mismo yá, y no quiero su lado malo solo lo bueno…. esto digo nos está llevando, y vuelvo al comentario de Paseante a que nuestras relaciones sean líquidas.
Mujer de 23 años, si vas a un encuentro con la esperanza con el anhelo de encontrar el sexo…. tendrás sexo, Tambien se pueden buscar relaciones en internet sin sexo… pero… eso ¿nos interesa?.
Los posibles compañeros y o amigas que las personas busquen en internet… ¿Intercambian antes de un encuentro cuales son sus pareceres y lo que esperan el uno del otro?. O… buscamos directamente la aventura.
Las aventuras, son eso aventuras, no nos hagamos ilusiones. Que despues suena la flauta, mejor, eso tenemos, pero aún así todas las relaciones conllevan un duro trabajo de mantenimiento,han de irse trabajando a diario y aún así, siempre se producirán roces apareceran las problemáticas, muchas de las cuales posiblemente no estaremos dispuestos a aguantarnos los unos a los otros.
Todo tiene una edad.
Mujer, con lo joven qué eres!…mándale a paseo. Qué no es ancho el mar y tu amor por ti suficiente., ninguno merece la pena sino te corresponde. Así que alguien con quien no tienes ningún tipo de relación, te vas a preocupar?. ¿Dónde está el espíritu práctico qué dicen que tenemos las mujeres?. , y además teniendo inteligencia y belleza. Ese es nuestro problema que perdemos el tiempo tontamente. Se feliz contigo misma y aparecerá alguien que se lo merezca. Besos.
Glossy, ante todo, siento tu decepción amorosa. Aunque te han dado buenos consejos, permíteme que te de mí punto de vista sobre tu relato que espero no te lo tomes a mal.
Ante todo me gustaría mencionarte lo que me parecen dos errores de partida en tu relato: la excesiva velocidad con la que pretendes vivir y tu actitud de forzar las cosas.
A tus 23 años cuentas con una relación fracasada de 6 años a tus espaldas y una decepción sobre las relaciones humanas y los hombres. ¡Pues no te quiero contar cual será tu concepto de los seres humanos y la vida cuando tengas 50 años o más!
Otro error de partida que compartes con muchos jovenes es creer que el sexo es el comienzo de una relación. Nada más lejos de la realidad.
Parece que eres una mujer inteligente y además dices que tienes un buen tipo. No se entiende entonces, a no ser que tengas una autoestima por los suelos, que te entregues sin más a alguien a quien solo conoces virtualmente.
En fin, mi consejo es que si quieres algo mejor para tí, debes aprender a valorarte más. Sin esto, no podrás esperar que la vida o los hombres te respeten.
Me quedo con que es una experiencia más de las muchas por vivir. Vivelas al máximo de ahora en adelante, enamorate pensando que es el último. Luego si no, y no es así, lo recordarás con una sonrisa y una lágrima en la cara.
Si le pones atención a esos hombres que te ofrecen o quieren un hombro, a lo mejor encuentras más relaciones sexuales que sólo follar (no sé si me he explicado, me refiero a que las relaciones sexuales son más que meterla y sacarla, más que un orgasmo, más que caricias…. es un TODO! de compartir con el otro).
Por cierto, adoro la ilustración. Me parezco, y hasta mi maleta es roja.
Gracias de nuevo por vuestras palabras, llevo toda la tarde releyéndoos!
Muak.
¡Muchas gracias por vuestras palabras!
Me encanta haber compartido mi historia con vosotros, y sobre todo que os haya gustado.
Sylvia, lo tendré en cuenta, es algo que llevo mucho tiempo planteándome; pero dar una oportunidad “fácil” ya sabemos que no mola. Los retos son los que nos atraen, y si pasan de nosotros, es cuando más nos llaman la atención.
Ann, ya sé que tengo que olvidarle. Fue corto, pero muy intenso. Me parece fatal que tras tantas promesas de “seremos amigos”, no se digne ni a un triste “qué tal?”; pero ahí estoy, sin poder olvidarme todavía de él. Me llegó muy adentro, por llamarlo de alguna forma.
Y gracias de nuevo a todos, me encanta leeros y vuestros ánimos!
Un beso fuerte 😉
Interesante historia que representa un poco el tipo de relaciones que -cada vez más- se están dando actualmente. Internet tiene unas peculiaridades para esto de las relaciones, como habéis comentado. A veces suena la flauta y se forman parejas sólidas y duraderas, la mayoría de las veces son breves y fogosa y fugazmente sexuales. Creo también que fuera de Internet también están ocurriendo cosas, se están disolviendo las relaciones pétreas y perpetuas (sí, todo esto suena a lápida de cementerio, por eso lo digo), y están volviéndose cada vez más frágiles, líquidas, breves. Hay quien lo ha bautizado como el sexo líquido, al igual que amor líquido, trabajo líquido, residencia líquida, salario líquido, creencias líquidas… frente a lo sólido del pasado. Todo esto no es tan nuevo pero está ocurriendo y todavía no sabemos cuán líquidos estaremos los próximos tiempos. Líquidos antes que polvo. Esta es la realidad que nos aguarda. Bueno, pues no tengamos miedo, tendrá sus cosas buenas y malas, como todo. Seamos optimistas y fluyamos. Be water my friends !
Gracias por compartir tu experiencia.
Vas a encontrar multitud de casos, todos diferentes… Yo doy gracias a la red por haber permitido que mi pareja y yo nos hayamos conocido. Jamás de los jamases nos hubiéramos encontrado en la vida real y está resultando un amor precioso. Le encontré con 35 años y un divorcio a nuestras espaldas. Ya llevamos casi cinco años juntos y cada día que pasa, estamos mejor.
Lo único que puedo y quiero decirte es que DISFRUTES de cada momento, de cada relación, de cada persona… Que tengas claro cuál es tu objetivo y que, mientras disfrutas, vayas a por él.
Mucha suerte en tu camino y en tu vida!
Còsmica.
Hola a todos!
Muchas gracias por la acogida de la historia. Me ha encantado abrir el post y ver tantos buenos consejos.
A los que se han sentido identificados, creo que el método de conocer pareja está tan de moda, que seremos tantos los “afectados”…
Respecto a los que me decís que soy muy joven, lo sé, pero creo que la vida no tiene la misma velocidad para todos. Hay personas que con 30 años tienen ya a sus espaldas muchísimas aventuras y experiencias, y otras que no han salido de su casa ni han tenido pareja. Yo considero que he vivido “algo rápido”, entonces a pesar de tener menos de un cuarto de siglo; siento que necesito algo más de las relaciones que se suelen tener a mi edad.
En cuanto a la página, encuentro de todo. Hay chicos que me ofrecen su cama, y otros que me ofrecen un hombro. Y, como el ser humano es así de irracional, a los segundos los paso más por alto, y a los primeros les doy juego; a pesar de que me ofrezcan lo que no quiero.
Lo de forzar la situación a lo que se refiere bbc, pues bueno, decidimos que sí, había sido todo muy rápido. Nos conocíamos virtualmente hacía dos semanas, cuando decidimos vernos. Y hacía un mes que nos conocíamos cuando nos vimos. Pero yo no vivo en su ciudad, ni en su país; por lo que no había otra forma. Tras el finde le propuse seguir siendo amigos, y aceptó encantado. Hace más de un mes de esto, y solo he hablado con él dos veces, que le he preguntado YO qué tal, y las conversaciones no han durado más de 2 minutos.
¿Si jugó conmigo? Puede ser. Una vez que lo conocí en persona, y la relación se fue enfriando día a día, llegué a pensarlo. Pero tras mil debates sobre la situación, decidimos que “no era su momento”. No me lo trago, lógicamente, pero también me consta que no quería solo un polvo. Por sus palabras, por como me miraba (por Skype, pero me miraba), por las ganas que le ponía a la situación… parecía bastante ilusionado. También era la primera vez para ambos que vivíamos una experiencia así, lo que incrementó aun más nuestras ganas de vernos.
Pero no pierdo la esperanza! Aun no lo he olvidado. Quizás por la situación tan intensa, porque me gustaba de verdad, o porque no he vuelto a encontrar ese feeling con otro hombre; pero sigue rondando por mi cabecita.
Muchas gracias por vuestros post, sigo esperando más!
Un besito muy grande 😉
GlossyShine
Solo un comentario. Dices: “Hay chicos que me ofrecen su cama, y otros que me ofrecen un hombro. Y, como el ser humano es así de irracional, a los segundos los paso más por alto, y a los primeros les doy juego; a pesar de que me ofrezcan lo que no quiero.” Quizás es algo a plantearse.
Te doy la razón.
Ser irracional lo veo casi equivalente a cambiar el sentido de las cosas o a complicarlas, algo que reiteramente he venido apuntando en este foro.
¿Por qué no escogemos la persona que más nos conviene? sería otra variante del dilema.
Partiendo que que nuestras decisiones son inconscientes, se trataria de saber detectar lo antes posible cuando nos hemos confundido para evitar persistir en el error o evitar futuras decisiones erroneas.
Pero esto requeriría un mutación generalizada ya que por propia definición, el hombre es el unico animal que tropieza dos veces en la misma piedra.
Hola GlosyShine. Perdona que sea dura, no lo suelo ser pero creo que deberias pensar en algo. Dices que no pierdes la esperanza. ¿No te da que pensar que si en un mes, solo habeis tenido 2 contactos de 2 minutos empezados por ti, es que no tiene realmente interés por tí? Por lo que dices hace a penas 2 meses que os conoceis, no crees que pese a todo, es poco tiempo y que deberia interesarte mas por ti? Seguro que tu te mueres por hablar con el (me estoy poniendo en tu situación porque lo he vivido) cosa que no es mutua por su parte. No merece la pena de verdad, a mi me ha costado un año darme cuenta pero ahora lo tengo claro. Te mereces una persona que te lo de todo, una persona real que este para lo bueno y para lo malo, para el sexo para darte un abrazo cuando lo necesitas, y sacarte una sonrisa cuando estas triste… Y eso en tu ciberamigo no lo vas a tener. Te daría un consejo aunque no soy la mas indicada. No busques, deja que aparezca una persona real (no cibernetica). Todo llega, y todo tiene su proceso. Mucha suerte de verdad, me ha conmovido mucho tu historia.
No me refería a forzr la situación en el sexo. Si no en cuanto al amor. Si además vivís en ciudades diferentes y demás, más aún. No dices claramente qué le propusiste pero dices que pusiste las cartas sobre la mesa para hablar del futuro. A eso me refiero con forzar la situación. Podías haber esperado a ver qué pasaba. Quedar alguna otra vez si surgía la ocasión. Pero ‘poner las cartas sobre la mesa para hablar de futuro’ tras sólo un finde juntos…. a mí tb me habría asustado!!!
Hola,yo también he quedado con varios chicos por internet y sólo han sido encuentros sexuales.De mi experiencia puedo decirte que no busques una relación de futuro en este tipo de encuentros ya que se da prioridad al deseo y al placer pero no a una relación futura ya que en realidad no conoces al chico en profundidad,son relaciones pasajeras para disfrutarla en el momento.Eres aún muy jóven ya encontrarás a alguien que se queda para siempre.
¡Qué identificada me siento con esta historia! Mi experiencia en una situacion parecida es que le gusto pero no quiere comprometerse. Yo tampoco quiero, disfruto muchísimo de mi vida de soltera. ¿Entonces cuál es el problema? Ni idea, pero sólo nos vemos dos veces al año. Y follamigos sí, pero para ser follamigos hay que follar, me parece a mí.
Así que he decidido que paso. Que le apetece echar un polvo, que me avise, eso sí, puede encontrarse con la sorpresa de un NO en el email. Y esto no sólo te lo digo a ti, mujer heterosexual de 23 años, también me lo digo a mí misma. Quizás deberíamos disfrutar un poco más y preocuparnos menos por ellos. En mi caso no le he planteado una relación más seria porque yo no la quiero y menos a distancia. Somos muy jóvenes (aunque yo sea un poco mayor que tú), lo que no podemos hacer es desesperar 😉 ¡Ánimo! Y gracias por tu confesión.
Estoy alucinando con este post. La cantidad de gente que hemos vivido cosas tan parecidas!
En la vida hay momentos para todo,fases en las que se busca sexo y otras en las que se requiere algo mas emocional o sentimental.Generalizando puede decirse que nosotros buscamos mas sexo y vosotras mas amor,pero no es del todo exacto ni siempre asi.Mientras se vaya de frente,tan lícito es una cosa como la otra.Siendo tan joven,hablar de fracasos es relativo,yo te animo a que vivas segun lo que te apetezca en cada momento y no dudes que el mejor camino para encontrar el amor es no forzarlo,simplemente surgirá donde menos te lo esperes.
No pierdas la esperanza, porque al final todo llega. Siempre les digo a mis amigxs que cuanto menos lo buscas más fácil llega, pero claro, eso no se puede controlar. La verdad es que yo disfruto mucho de la vida de soltera, le veo muchas ventajas, pero también es genial compartir esos momentos de cariño con alguien más especial. Me ha encantado esta frase: “creo que ya necesito un abrazo, un beso en la frente y una tarde entera en el sofá viendo películas sin argumento, disfrutando de compañía”, me siento muy identificada, porque el cuerpo a veces te pide eso.
Me parece muy buena opción conocer gente a través de internet. En tu caso, si me permites una observación, para lo que tú buscas, es quizá mejor hacerlo poco a poco. Conocerte y ver qué pasa. Aún así, ese tipo de relaciones tienen es hándicap, es posible que ni él supiera cómo iba a reaccionar, porque al verdad es que la emoción por algo diferente, los calentones a distancia y la ilusión porque alguien desconocido alimente tus deseos, generan un boom que no es del todo real, real.
A mí me ocurrió algo parecido. No le conocí por Internet, sino en persona, pero nuestro avance fue por Whatsapp. Yo me enganché bastante a ese juego y cuando fui a conocerle a su ciudad me encantó (y yo iba más bien con la idea contraria, en plan, un finde loco y a casa). Pero se me fue de las manos. Y sin embargo, a él se le fue pasando la intensidad poco a poco. No es el fin del mundo, aunque siempre jode, está claro. Pero si lo analizas, tiene mucho sentido, al fin y al cabo no conoces a esa persona, no es un proceso lento, es más bien frenético y mezclado con altas dosis de juego y emoción. Lo que queda después del ansia muestra si puede cuajar o no.
¡No te rindas! ¡Llegará! ¡¡Por dios, tienes 23 años!! 🙂
Yo llevo dos años sin pareja y también me apunté a estas páginas “por curiosidad”. Y la verdad es que hay que concienciarse de que son sólo para follar… Seguro que más de uno ha encontrado al amor de su vida, pero el 90% de las personas que se apuntan son para echar un polvo… bueno o dos o tres, pero no para tener relaciones formales. Yo conocí a un chico y hemos estado año y pico como follamigos… más folla que amigos porque sólo tenía noticias de él cuando quería tema… y cuando empecé a notar que me gustaba más de la cuenta y que quería algo más, le propuse dar un paso más y me respondió con un: “esto es lo que es creía que lo tenías claro”… En fin, es sólo mi experiencia… por si le sirve a alguien…
Aunque tengo unos cuantos años mas que tu, me siento identificada con la foto y con tu relato. Relacion larga, conozco una persona por internet y preparo en este caso dos viajes de trabajo a su ciudad para conocerle y coincidir en mi habitacion del hotel. Largas sesiones de sexo en las que disfrutamos a tope. Y despues? El se fue enfriando, hasta acabar la ciberrelacion. No se si los hombres deberian ser mas claros cuando empiezan esas cosas o nosotras mas listas. Estoy totalmente de acuerdo con la ultima frase de 676. Te deseo mucha suerte, eres muy joven y hermosa, tienes mucho que ofrecer (y no solo sexo) y toda la vida por delante!
En mi opinión, el problema es que has forzado una situación. Tras un finde de sexo, igual podrías haber quedado más veces, ir conociéndoos mejor, pero no querer atar a alguien por haber tenido sexo un fin de semana. Para mí, eso es forzar los acontecimientos.
Y lo de esmerarte, te lo digo para la próxima, no te esmeres tanto por alguien que no es tu novio. No tienes ninguna obligación. Además, a los chicos les gusta que les den cañita. Si eres muy buena, te pueden tomar por tonta.
Estoy de acuerdo contigo.
Totalmente de acuerdo, salvo en lo de que nos gusta que nos den caña ¿? Eso depende, a mí no. Y lo mismo digo de los chicos que opinan que a las chicas les va la marcha. Ése tipo de relaciones no son sanas y acaban mal. Si te toman por tonta porque te esmeras, es que indudablemente estás ante un auténtico capullo.
Saludos ^^
coincido plenamente..
No me refiero caña de ser mala. Pero no ponerlo todo tan fácil. A quien no le gusta algo un poquillo complicado, los retos? Le da más salsa a las cosas y te aseguro que no hablo sólo por mí. Y no te digo que este chico no sea un capullo, probablemente lo sea, pero si encima se lo pones tan fácil, más capullo se pondrá aún.
Totalmente de acuerdo contigo. Buen y breve comentario.
Me doy cuenta que le había respondido de una forma muy parecida.
Me hace mucha gracia tu historia, mujer heterosexual de 23 años, ya que yo tengo tu misma edad, salí con alguien desde diciembre de 2006 hasta finales de septiembre de 2012 (o sea, casi seis años de relación y dejándolo hace casi seis meses), y también me adentré en el mundo de las “páginas de contactos”.
Hasta el momento mi experiencia no ha sido muy satisfactoria tampoco. Tengo la impresión de que ese chico jugó contigo, al igual que una chica que encontré en esas páginas también jugó conmigo de mala manera. Lo que cambia es la forma, y eso me hace pensar en una frase muy tópica pero bastante cierta que leí hace poco:
“Los hombres mendigan amor para conseguir sexo, mientras que las mujeres mendigan sexo para conseguir amor”