Barry R. Komisaruk, Beverly Whipple, Sara Nasserzadeh y Carlos Beyer-Flores (Paidós Autoayuda, 2011)
Por qué leerlo… porque analiza el orgasmo desde los más variados ángulos, incluye mucha información, y lo firman, entre otros,  Komisaruk, neurocientífico, y Whipple, una de las redescubridoras del punto G, dos de los investigadores más relevantes en el campo de la sexualidad.

Quizás pienses que basta con tenerlos (de hecho, no todo el mundo tiene la suerte de alcanzarlos, o sea que ya tienes todo eso ganado), pero, no te quepa duda, comprender, ir más allá de la superficie, nos ayuda a ampliar nuestras miras y con ello a mejorar nuestro placer. El saber no sólo no ocupa lugar, mejora nuestras vivencias.

Esta guía del orgasmo está escrita en forma de preguntas y respuestas, lo que facilita enormemente su lectura. Incluye aproximadamente unas cien entradas, divididas en ocho capítulos, que abarcan todo tipo de cuestiones: desde a qué edad comienzan y si se acaban en algún momento (léase la vejez), hasta cómo se viven en función de la cultura a la que pertenecemos, pasando por cuestiones de lo más cotidiano (¿por qué a algunos hombres les suele provocar sueño? o ¿afecta el ciclo menstrual?) a lo más complejo. Por poner un ejemplo de esto último: ¿cuál es la razón de ser del orgasmo? En el hombre está clarísimo, suele provocar la eyaculación (necesario para la perpetuación de la especie), pero ¿y en la mujer? ¿Para qué sirve en la mujer? Esta es una de las cuestiones más interesantes que aborda el libro, además del apartado dedicado a los orgasmos no genitales, es decir, aquellos que se alcanzan durante el sueño, o con el sólo uso del pensamiento, meditando e incluso durante el rezo. Es probable que hayáis oído o leído alguna vez que hay investigadores que consideran que los  éxtasis de Santa Teresa eran en realidad orgasmos.

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